En un ambiente lleno de misticismo, se llevaron a cabo en Chignahuapan los tradicionales festejos de Día de Muertos, en el marco del penúltimo día de actividades de la 19ª Feria Nacional del Árbol y la Esfera.
La celebración comenzó con la inauguración de la Ofrenda de las Mil Luces, elaborada por alumnos y docentes del CECyTE Plantel Chignahuapan, que en esta ocasión estuvo dedicada a Rafael Méndez Núñez, precursor de la esfera en el municipio y quien falleciera en agosto pasado. Asimismo, se inauguró el tapete de aserrín, elaborado por habitantes del barrio de Ixtlahuaca, mostrando motivos relativos a la ocasión.
En el acto inaugural estuvieron presentes Roberto Trauwitz Echeguren, Secretario de Turismo del Estado; Irving Mayet Gudiño, Subsecretario de Turismo estatal; José Luis Márquez Martínez, Diputado Federal; Lorenzo Rivera Sosa, delegado en Puebla de la SEDATU; y por supuesto los anfitriones del evento, Juan Enrique Rivera Reyes, Presidente Municipal de Chignahuapan, y su esposa Yolanda Solorio Stankiewicz, Presidenta del Sistema DIF, así como Héctor Juárez Tapia, párroco de la ciudad; Jorge Hernández Tapia, Director del CECyTE, y Karen 1ª, reina de la feria.
Tras la inauguración, se comenzó con la ya tradicional Marcha de la Antorchas, en la que autoridades y ciudadanos marcharon del zócalo de la ciudad hacia la laguna sobre la Calzada de las Almas.
Al arribar a la laguna, se dio inicio con el Festival de la Luz y la Vida, el cual cada vez atrae más turistas y ha sido declarado ya Patrimonio Cultual Intangible del Estado. En esta representación participan más de mil 500 personas, entre actores, danzantes y organizadores, y se realiza en un escenario compuesto por una plataforma con una pirámide sobre la cual se desarrolla la historia.
Según la cosmogonía náhuatl, este místico ritual representa las nueve pruebas que el alma del guerrero Ome Ecatl Ocelotl debe enfrentar para llegar al Mictlán o lugar de los muertos. Entre las nueve pruebas que deberá enfrentar se encuentra atravesar el río Chignahuapan.
Una vez superados estos obstáculos, el alma de Ome Ecatl Ocelotl habrá de llegar al sitio donde descansará eternamente después de la vida. Durante el recorrido de esta alma, el dios Xolotl (el divino perro bemejo) le acompaña para ayudarle a enfrentar los temores propios del ser humano.
La tradición de ofrendar y recibir a los muertos se celebra en el municipio con el objetivo de rescatar las tradiciones y se ofrece también como un atractivo turístico y cultural que año con año atrae a cientos de visitantes nacionales y extranjeros.
Díade Muertos en Puebla
La celebración del Día de Muertos, es una de las tradiciones más representativas de la cultura mexicana.
Esta tradición es considerada por la UNESCO como patrimonio de la humanidad.
En cada uno de los municipios del estado se llevan a cabo diversas actividades para celebrar este día, donde se aprecian diferentes aspectos de la cultura poblana.
Puebla cuenta con 50 celebraciones donde se realizan actividades especiales para celebrar de este día, destacan.
Festival de la Luz y de la Vida de Chignahuapan: conjunto de rituales prehispánicos que muestran la importancia del Día de Muertos para nuestra cultura.
Altares monumentales de Huaquechua: son el resultado de fusionar la tradición ornamental prehispánica de la región con la estética de los altares de la tradición católica, dedicados cada año a las personas que fallecieron durante los meses previos.
El Tributo a los Fieles Difuntos de Tochimilco: se elaboran grandes altares con profusión de ornamentos y detalles, en dedicación a los fallecidos a lo largo del año.
Elaboración de tapates de flores y aserrín en Atlixco: se colocan ofrendas y se hacen tapetes monumentales en el parque principal junto a la presidencia
Exposición de ofrendas en Puebla capital – Corredor de Ofrenda
Época Prehispánica – Barrio del Artista